4961099257_c2c18b7820_o

AMRIS Impulsando la Producción de ¨Lombricomposta¨

El aprovechamiento de los desechos orgánicos en la agricultura es muy importante pues además de enriquecer el suelo, reduce la necesidad de utilizar fertilizantes sintéticos y por ende, contribuye a minimizar la contaminación del medio ambiente. El uso de “la lombricomposta”, (abono producido a base de la lombriz coqueta roja) es una práctica que está siendo cada vez más utilizada por personas y comunidades interesadas en la sostenibilidad integral de sus cultivos, viveros y huertos. Éste es el caso de la Asociación de Mujeres Río Isquizal (AMRIS), ubicada en Sebastián, Huehuetenango, quienes en septiembre de 2020, comenzaron a trabajar un proyecto de lombricomposta, aprovechando el estiércol de ganado ovino (ovejas y pelibueyes). Este proyecto involucra a 16 grupos de mujeres (256 mujeres en total) y la idea surgió al comentar entre las asociadas, cómo aprovechar de mejor manera las excretas de estos animales. Algunas de las compañeras en AMRIS habían escuchado de la producción de abono utilizando la lombriz coqueta roja (Eisenia foetida), y lo beneficioso que es realizar el compostaje y producir fertilizante orgánico. 

El técnico agrícola Carlos Herrara Sajxché, quien trabaja en conjunto con AMRIS en este nuevo proyecto, explica que la lombriz coqueta roja es una especie muy utilizada en proyectos de reciclaje de residuos orgánicos, pues ésta tiene una gran capacidad para digerir residuos orgánicos y por lo tanto, el abono que generan es catalogado como fertilizante de alta calidad. También comenta que la lombricomposta mejora las propiedades del suelo porque contiene altas concentraciones de nitrógeno, potasio, fósforo y magnesio, además de aportar minerales y micronutrientes necesarios para los cultivos.  Carlos indica, que aunque la lombriz coqueta roja se alimentan de diversos desechos orgánicos, uno de los mejores sustratos para esta especie son los estiércoles (de conejo, ganado mayor y menor como: vacas, toros, caballos, ovejas, pelibueyes, cabras) y no así el de aves y cerdos, ya que estos últimos contienen altas concentraciones de amoniaco, por lo que podrían morir. 

La crianza de lombrices es una alternativa que permite aprovechar los desechos del ganado ovino, (que es muy común en estas áreas del país) y utilizarlo en las siembras para mejorar la producción de los cultivos locales. Odilia Gregorio, coordinadora general de AMRIS, comenta: “sustituir el abono químico por abono 100% orgánico es uno de los objetivos principales de AMRIS”. Por ello, recientemente Carlos realizó un pequeño taller comunitario para dar a conocer el proceso de producción de este compostaje. Básicamente, el proceso se inicia con la construcción del refugio o casa para las lombrices, se recomienda que sea una caja de madera con medidas especiales. Luego se recolecta el estiércol y los desperdicios que se tengan en la cocina y se introducen en la caja mezclados con un poco de tierra. Finalmente se coloca la lombriz en la caja y en alrededor de uno o dos meses se tendrá listo el abono orgánico. 

El proceso de producción de lombricomposta requiere de un buen manejo y cuidado, por eso Carlos recomienda mantener bien cubierta y tapada la lombricompostera, ya que estas lombrices no toleran el exceso de agua. Además se debe evitar el ingreso de animales perjudiciales para la lombriz como las hormigas, arañas o aves de corral. Aunque el manejo de esta compostera requiere de bastante atención y cuidado, las mujeres de AMRIS están animadas pues saben que además de obtener el abono, aprenderán a criar la lombriz y a futuro esperan poder venderla. Ellas también esperan producir abono para sus cultivos y generar un excedente para vender a sus vecinos o en las comunidades cercanas.

Las asociadas de AMRIS saben que como en otros proyectos, esta experiencia les brindará nuevos conocimientos y mejorará su liderazgo, lo cual asegura la estabilidad, continuidad y sostenibilidad de su grupo. Sin duda alguna, con el uso de la lombricomposta habrá un impacto ambiental positivo para esta comunidad y en definitiva, este será un proyecto que aportará muchas buenas experiencias para las mujeres de AMRIS. Esperamos que este pequeño proyecto comunitario se convierta en un ejemplo para otras comunidades y que juntos retomemos prácticas amigables con la agricultura y con el medio ambiente. 

 

Foto por John Lodder disponible en flickr