480974575_1168096355325910_5626432465360531370_n

Guatemala: Entre la crisis institucional y los desafíos económicos

POR SAMUEL ÁLVAREZ

En los últimos años, Guatemala ha atravesado un escenario político y económico caracterizado por una serie de desafíos significativos que han puesto a prueba la estabilidad de sus instituciones y la seguridad de sus ciudadanos. La confrontación entre el Ejecutivo y otros organismos del Estado, los conflictos en el Tribunal Supremo Electoral (TSE) y el deterioro del Estado de Derecho han generado un clima de incertidumbre y desconfianza en la administración pública.

La tiranía judicial y la crisis del estado de derecho

Uno de los puntos más críticos ha sido la injerencia política en las decisiones judiciales. La controversia en torno al partido Movimiento Semilla, así como la persecución de jueces que han emitido resoluciones contrarias a los intereses de la Fiscal General, evidencian un uso discrecional de la justicia.

A esto se suma la investigación a candidatos del Colegio de Abogados y Notarios, con el aparente propósito de evitar su participación en elecciones gremiales claves para la conformación de las comisiones de postulación del próximo Fiscal General del Ministerio Público. Mientras tanto, persiste la falta de investigaciones en contra de actores señalados por corrupción, lo que profundiza la percepción de una justicia parcializada y selectiva.

Foto: Redes sociales

El Congreso: Entre conflictos internos y la erosión del estado de derecho

El Congreso de la República de Guatemala no se escapa de esta crisis. Actualmente, enfrenta problemas internos entre bancadas y una junta directiva que ha inobservado resoluciones judiciales, aplicando criterios discrecionales según sus propios intereses. Estas acciones han minado la confianza en la eficacia del Estado de Derecho, pues si los altos funcionarios del país no cumplen las normas vigentes, ¿qué se puede esperar para la ciudadanía en general? Inestabilidad en el Tribunal Supremo Electoral Los conflictos internos dentro del Tribunal Supremo Electoral (TSE) también han exacerbado la incertidumbre política. La falta de consenso entre magistrados titulares y suplentes, junto con los cuestionamientos sobre la legitimidad de la presidencia en funciones, han debilitado la confianza en el sistema electoral. Esto no solo pone en duda la transparencia de futuros procesos electorales, sino que también refuerza la desconfianza en la institucionalidad democrática del país.

Guatemala ha enfrentado múltiples desafíos en un contexto de incertidumbre global. Aunque la economía ha mostrado señales de recuperación tras los efectos de la pandemia, el crecimiento ha sido moderado. La inestabilidad política ha generado un ambiente de cautela entre inversionistas nacionales y extranjeros, limitando la atracción de capitales necesarios para un desarrollo más dinámico.

A pesar de los discursos oficiales que destacan un crecimiento económico constante, este no se debe a un aumento en la inversión productiva, sino a dos factores clave. Primero, el crecimiento del aparato estatal, que año con año emplea a más personas, y segundo, el incremento de la migración guatemalteca hacia el extranjero.

Las remesas enviadas por los migrantes han sido un pilar fundamental para sostener la economía del país, lo que evidencia su fragilidad estructural. Sin embargo, con las recientes medidas económicas implementadas por el gobierno de los Estados Unidos, la estabilidad financiera de Guatemala y de la región está en riesgo.

Reformas estructurales para superar estos desafíos

Guatemala necesita fortalecer su institucionalidad, fomentar la transparencia y promover el diálogo entre los diferentes poderes del Estado. Solo así se podrá alcanzar una mayor estabilidad política y un crecimiento económico inclusivo y sostenible. Es imperativo implementar reformas estructurales que reduzcan las brechas sociales y mejoren la inversión en infraestructura y servicios básicos. Garantizar el Estado de Derecho es fundamental para generar un clima de confianza que atraiga inversiones y fomente la participación ciudadana en la toma de decisiones.

Sin estos elementos, el país continuará enfrentando los mismos problemas estructurales que han marcado su historia reciente, impidiendo su desarrollo y el bienestar de su población.

Por otra parte, la radicalización en Guatemala ha llegado a un punto en el que algunos creen que solo su forma de pensar es válida. Para ellos, discrepar es un pecado, matizar una traición y pensar diferente, un crimen.
Lo más irónico es que se llenan la boca hablando de derechos humanos y libertad de expresión, pero en el fondo solo defienden su derecho a imponer sus ideas. Si no piensas como ellos, te quieren callado, censurado y sometido. Si no piensas como ellos eres malo, corrupto, un enemigo.

Contexto local

Xela es una anarquía en la que cada quien hace lo que quiere. Esos años de “la cuna de la cultura” se quedaron en los libros de historia.

El descontento por el alza de los precios de la energía eléctrica es legítimo, la causa de Sacándole Brillo a Xela, (SBX) es justa… pero vale la pena preguntar lo siguiente: ¿Qué mensaje transmite que personas que NO son de Quetzaltenango como Sergio Morataya, en la lucha hoy están al frente, liderando una manifestación convocada por un comité cívico quetzalteco que se manifiesta en contra de las arbitrariedades del alcalde y el concejo municipal de Xela? ¿por qué estos personajes de redes sociales aparecen en Xela? ¿quién paga sus gastos? o ¿vienen por likes? También vale la pena preguntar: ¿por qué el líder de la oposición, no figura, no aparece? deja que otros sufran el desgaste mediático, físico y emocional.

Foto: Redes sociales

Samuel Álvarez Morales. Analista político, integrante de Visión Legislativa y fundador de Voluntarios por Xela.