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La represión contra CODECA: La criminalización de la organización

Por Leiria Vay, comunicadora de Codeca —

Amenazar y asesinar es un mecanismo para generar terror y dudas, que en Guatemala no solo es historia, sino prácticas que siguen vigentes y que cada día dejan más víctimas en el pueblo Guatemalteco. Los sectores de poder, con la participación o en contubernio con las mismas autoridades estatales, reprimen a quienes intentan alzar su voz, organizarse y decir, ‘Basta ya de tantas injusticias, exigimos nuestros derechos.’

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CODECA surgió en 1992 para exigir el derecho al acceso a la tierra y salarios justos en las fincas agrícolas de la Costa Sur de Guatemala. Actualmente, después de 23 años defendiendo derechos, las luchas de CODECA siguen siendo el derecho a la tierra, el salario justo y también se han sumado a la lucha por la equidad de género, por la participación y desarrollo de la juventud campesina, los derechos de los pueblos indígenas y la lucha desgraciadamente controvertida por el derecho al acceso a los servicios básicos, como agua, salud, y electricidad.

El mecanismo de trabajo de CODECA está basado en la organización, la formación sociopolítica, la movilización y el poder local. CODECA cuenta con organización en 20 de los 22 departamentos de Guatemala, y trabaja con 15 microrregiones que mantienen coordinación y procesos de formación permanente.

Como consecuencia de las diferentes luchas, en los últimos meses se ha intensificado una campaña de persecución y criminalización contra CODECA. Esta campaña sucia busca principalmente desvanecer la organización y trata de esconder la verdad y así seguir saqueando los recursos naturales y violando los derechos individuales y colectivos del pueblo guatemalteco.

‘Por la publicación de un estudio sobre condiciones laborales agrícolas que muestra que en Guatemala miles de familias viven en condiciones de semi-esclavitud, el CACIF y la Cámara del Agro señalaron a CODECA de estar en contra del desarrollo.’

Por la publicación de un estudio, disponible en nuestro sitio web, sobre condiciones laborales agrícolas que muestra que en Guatemala decenas de miles de familias viven en condiciones de semi-esclavitud, el CACIF (Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras) y la Cámara del Agro señalaron a CODECA de estar en contra del desarrollo y la inversión privada. Además, los 117 investigadores comunitarios voluntarios sufrieron algún tipo de persecución por haber participado en la investigación y socialización de esa realidad. De ellos, dos fueron asesinados. Los dos tuvieron amenazas previas vía telefónica donde se les advirtió de no meterse en ‘babosadas.’ Ambos siempre ejercieron un liderazgo comunitario en CODECA. Enrique fue ahorcado cerca de su casa en Huehuetenango. Héctor fue degollado en su casa frente a su familia. Entremundos no publica los apellidos por razones de seguridad.

Ante la privatización de la energía eléctrica, varias comunidades miembras y no miembras de CODECA se encuentran en resistencia exigiendo nacionalización para no tener que pagar montos abusivos a empresas extranjeras o de la oligarquía guatemalteca para la electricidad, un derecho fundamental. Ante esta lucha comunitaria amplia, CODECA ha pedido públicamente al gobierno de Guatemala que atienda esa demanda de la población. La respuesta estatal ha sido de señalamientos infundados y amenazas públicas por parte del Presidente, Vicepresidenta y Ministro de Gobernación diciendo que emitirán ordenes de captura contra toda la dirigencia de CODECA, así como una campaña sucia de difamación por parte de la empresa distribuidora de energía eléctrica, Energuate, cuyo dueño mayoritario es la firma inglesa Actis Capital.

Por la resistencia comunitaria exigiendo el derecho a la energía eléctrica, así como por las luchas por el derecho a la tierra y los salarios dignos en el campo, en el 2014 miembros de CODECA sufrieron tres asesinados, 68 heridos o agredidos, 44 encarcelados, y siete secuestrados, así como cientos de amenazas. La persecución estatal no ha sido únicamente iniciar proceso penal contra defensores/as  de derechos humanos, sino también en contubernio con agentes privados quienes  secuestran, agreden y amenazan de muerte a defensores y luego los encarcelan.

En Marzo del 2014, un grupo armado, expresamente en defensa de los intereses de Energuate/Actis, atacó a miembros de CODECA quienes se encontraban en una reunión departamental de defensores comunitarios en la Aldea Cayuga, municipio de Morales Izabal.  Después de haber agredido a varios defensores presentes (entre ellos varias mujeres, niños y ancianos), los hombres armados se llevaron a tres defensores, les dieron una golpiza, y les dejaron con las instituciones del estado (la Policía Nacional Civil y el Ministerio Público), quiénes los encarcelaron por más de tres meses. Esos hombres armados siguen amedrentando a las comunidades organizadas diciendo que si siguen organizados los encarcelarán o matarán.

En Junio de 2014, agentes privados de ENERGUATE que se hicieron pasar por miembros de un COCODE secuestraron por cuatro horas líderes nacionales de CODECA (el coordinador nacional, la vicepresidenta y un defensor comunitario de CODECA) en Chiantla, Huehuetenango, y luego los entregaron a la policía quienes en vez de liberarlos los encarcelaron. Estos defensores fueron ligados a proceso por los delitos de ‘atentado contra la seguridad interna de la nación’ y ‘caso especial de estafa.’ El juez no aceptó el recurso de Exhibición Personal a pesar que no había ninguna prueba de delito contra los defensores. Actualmente estos defensores se encuentran en libertad condicional, limitados sus derechos de organización, sus derechos políticos y también de locomoción fuera del perímetro departamental y en espera de audiencia para debate programada para el febrero del 2016.

El 15 de Agosto de 2014, parte de un grupo de más de 1000 policías dispararon contra una manifestación que bloqueaba la ruta que tomaba la policía después de arrestar a varios vecinos por su supuesto involucramiento con CODECA. Asesinaron a balazos a tres defensores comunitarios y encarcelaron a otros 22 en la aldea Semococh, Alta Verapaz. Durante este ataque también resultaron heridas otras 65 personas. Hasta la fecha las personas que fueron encarceladas están en libertad condicional y ligadas a procesos en su contra.

Ante la ola desatada de persecución y criminalización contra defensores/as de los derechos humanos, CODECA ha buscado mecanismos de protección y autoprotección para quienes luchan por defender los derechos desde las comunidades.

Organizamos una red de defensores comunitarios para la protección y autoprotección. Esta red empezó a integrarse a finales del 2013 y fue fortaleciéndose en todo el año 2014. La finalidad de la red es proteger los defensores de derechos humanos desde las comunidades, teniendo como primer punto de apoyo la comunidad. En el 2014 se integraron 11 puntos focales o microrregiones quienes ha trabajado en un diagnostico en su microrregión para identificar sus debilidades, amenazas, fortalezas y actores en apoyo. Elaboramos y socializamos una guía para defensores/as comunitarios basada en la experiencia y elaborado de manera participativa local. La guía es una herramienta que identifica como debe de ser un defensor de derechos humanos y las medidas de precaución que este debe protegerse y auto protegerse. Hacemos capacitaciones en derechos humanos mediante jornadas participativas para generar capacidades locales y dar a conocer leyes y convenios internacionales que amparan en teoría nuestros derechos y organizaciones. Principalmente se ha enfocado en el código de trabajo y el convenio 169 de la Organización Internacional de Trabajo.

CODECA se ha unido a otras redes nacionales para la denuncia de la represión contra los defensores. Este esfuerzo ha dado como resultado la denuncia de alungos casos y ha hecho que varias misiones nacionales e internacionales investiguen los casos, visiten a los defensores encarcelados y con ello se ha generado presión sobre el gobierno de Guatemala para frenar un poco la persecución.